Tarjeta de crédito Wizink Plus

Puesto que no siempre las necesidades coinciden con la disponibilidad de efectivo, siempre es interesante disponer de algún tipo de fórmula de financiación.

Hoy en día existen posibilidades rápidas y cómodas de solicitar créditos online para cuando se presenta esta circunstancia, pero cuando en lugar de hacerlo puntualmente se presenta con cierta frecuencia, puede ser más cómodo echar mano de una tarjeta de crédito.

A continuación detallamos el funcionamiento, características y condiciones de la tarjeta de crédito Wizink Plus.

Qué es

Wizink Plus es una tarjeta de crédito revolving, lo que significa que ofrece la posibilidad de realizar compras aplazando los pagos por medio de una cuota. Esto no deja de ser una fórmula de financiación que, como en cualquier otro caso, conlleva el pago de unos intereses.

Mucho se ha hablado de situaciones en las que algunas personas se han visto envueltas en una espiral de deuda por el uso de tarjetas de crédito revolving, pero no necesariamente ha de ser así.

Las tarjetas de crédito son un instrumento, en unos casos con mejores condiciones y en otros con peores, pero lo que determina el impacto que puedan tener en nuestra economía es, principalmente, el uso que se hace de ellas.

Cómo funciona

La tarjeta de crédito Wizink Plus ofrece la posibilidad de pagar todas las compras realizadas durante el mes en un único pago o hacerlo por medio de cuotas, dividiendo el total y aplazando dichos pagos para una mayor comodidad.

La diferencia entre un método y otro es que si se elige pagar el total a final de mes, lo que se carga en la tarjeta no es más que el coste de dichas compras sin ningún tipo de recargo, mientras que si se opta por un aplazamiento, habrá que establecer la cuantía de la cuota la cual cubrirá una parte del valor de las compras más los correspondientes intereses.

Para solicitarla basta con rellenar un formulario en el que hay que facilitar un mínimo de información personal, si bien como siempre sucede en el caso de las tarjetas, la concesión estará sujeta a la aprobación de la entidad bancaria emisora, WiZink.

Condiciones

Los intereses se aplican a cualquier pago que se aplace, y en el caso de la tarjeta WiZink Plus son bastante razonables, sobre todo si los comparamos con otras opciones de financiación como los microcréditos.

Según se informa en la web, las condiciones de financiación que se aplican son de un 20,90%. TAE o un T.I.N. del 19,13%..

Existen varias posibilidades para el pago aplazado:

1. Pagar un porcentaje del total de las compras cada mes,
2. Pagar una cantidad fija cada mes que resulte asumible y que el propio usuario establece,
3. Pagar la cuota mínima, que es de 18 euros.

En resumen, establecer la cuota mínima ofrece una mayor comodidad, pero el pago total será más elevado ya que se alargará en el tiempo y durante ese periodo se estarán generando intereses adicionales.

Si por el contrario se opta por pagar una cuota más alta, estos intereses se verán reducidos, ya que el pago se completará antes.

Ventajas de la tarjeta Wizink Plus

Además de la ventaja intrínseca de cualquier tarjeta de proporcionar una gran flexibilidad a la hora de afrontar tus compras, la tarjeta Wizink Plus tiene una serie de ventajas específicas que pasamos a enumerar a continuación

• La forma de pago puede cambiarse en cualquier momento de forma sencilla: si no estás en una situación económica que te permita comprar algo de una sola vez, puedes aplazar el pago, pero si unos pocos meses más tarde las circunstancias han cambiado, no tienes por qué seguir pagando intereses y puedes amortizar el pago de golpe,
• La tarjeta Wizink Plus te devuelve un 3% del total de compras que hayas realizado en dos categorías a elegir entre moda, ocio, viajes y alimentación, aunque hay que aclarar que el máximo a devolver tiene una limitación de 6 euros al mes o 72 al año,
• Las compras por un valor entre 81 y 1.000 euros pueden pagarse en 3 meses sin coste extra,
• Dispones de cobertura de seguros de Asistencia en viajes 24h y Protección de compras de forma gratuita.

Costes de la tarjeta

La tarjeta no tiene costes de apertura ni mantenimiento, pero sí hay otro tipo de operaciones que pueden implicar un cargo.

Sacar dinero del cajero, realizar una transferencia de efectivo a tu cuenta corriente, o sacar efectivo en un cajero en una moneda distinta al euro, son acciones que conllevan el pago de comisiones.

También, como es lógico, hay pagos relacionados con la demora en el abono de las cuotas o por exceder los límites del crédito.

Y a esto hay que añadir los costes derivados de cualquier gestión que el banco te cobrará: solicitar extractos en papel, solicitar una nueva tarjeta por extravío de la existente, gestiones por cambios de productos contratados, etc.

Datos de contacto

Wizink pone a nuestra disposición un servicio de atención al cliente que cuenta con distintas líneas telefónicas especializadas en temas concretos.

Además WiZink facilita las siguientes direcciones de correo electrónico habilitadas para reclamaciones o consultas relacionadas con el seguro:

También podemos contactar con WiZink desde el área de clientes, la app, sus redes sociales (Facebook: @wizink.es y Twitter: @wizinkbank), o su blog.

Conclusión

Las tarjetas de créditos tienen apasionados defensores y detractores. No es nuestra intención aquí el promover o alentar el uso de este producto, sino más bien exponer los beneficios y riesgos que ofrece su uso y valorar hasta qué punto ofrece condiciones interesantes una tarjeta en concreto como la de Wizink Plus.

Teniendo en cuenta que sus intereses son razonables y que ofrece ventajas adicionales como el cashback y la posibilidad de dividir muchos pagos en 3 mensualidades sin aplicar intereses, el uso de la tarjeta Wizink Plus parece una buena elección para aquellos que quieren disponer de una herramienta flexible.

Por supuesto, será el uso adecuado o no que cada uno haga de ella lo que la convertirá en una opción de financiación valiosa o un problema, pero el producto en sí no cuenta con más inconvenientes que los que se derivan de tratar con los bancos, o lo que es lo mismo, tener que pagar por cada gestión que se solicite.